

¿Por qué con teatro?
Esta es la pregunta que invariablemente hemos encontrado en reuniones de trabajo de capacitación, con diferentes gerentes del área o de RH en diversas empresas, ya que es el distintivo de nuestro modelo y la preocupación principal de posibles variables en resultados o impartición e impacto. Hace casi dos décadas ingrese a la Universidad Nacional a estudiar Teatro y me resulto increíble que durante el 1er año me fue prohibido hablar, el motivo, tener que re-aprender los lenguajes humanos de pensar, sentir, corporal y por supuesto verbal que sería de los últimos en trabajarse.
“Primero debes entender tus sentimientos y como afectan tu pensamiento, elaborar tus ideas y ya enhebradas podrás expresarlas en tu propia voz”
Para preparar a un actor se debe romper con lo aprendido que en muchas ocasiones es erróneo y no muy adecuado para las artes escénicas, debemos de reajustar nuestra forma de vivir nuestra experiencia sensorial y cognitiva del mundo exterior, para depurar nuestra capacidad de traducción del mismo y la construcción de mensajes complejos que van más allá de las palabras.
“Sentado en silencio en tu escritorio frente a la computadora o en tu casa frente al televisor, ¿Crees que por no hablar no estás comunicando tu estado de ánimo y tus preocupaciones a los que te rodean y observan?”
El escenario es un escaparate que potencializa las capacidades humanas de una forma controlada, pensada y orientada. Al empezar a estudiar actuación, se parte de la premisa que antes de buscar convertirnos en grandes actores, debemos convertirnos en grandes seres humanos y esta descripción no tiene nada que ver con el bien o el mal, sino con la capacidad del autoconocimiento y manipulación de nuestras herramientas: cuerpo, voz, emociones, pensamientos, imágenes, memoria, semiótica, heurística y mayéutica.
Al igual que un niño se enfrenta al conductualismo, al castigo y error y a la par por imitación mimetizamos los defectos y las virtudes de nuestros padres, a través del empirismo nos desarrollamos, pero no con conciencia de nuestros actos y mucho menos de nuestros sentimientos. El teatro es un vehículo de autoconocimiento y desarrollo interno y externo.
Directora.- ¿Por qué la niña le grita a su muñeca?
Maestra.- Dice que así, es como va a aprender la muñeca a ser buena.
Hace menos de medio siglo se empieza a hablar del concepto de inteligencia emocional, cuando en el teatro desde hace más de 20 siglos con los griegos se estudia el fenómeno de la Catarsis y el vinculo de la emoción con la acción (DRAMA)
Hoy por hoy, otro tema que es muy recurrido es: ¿Como hablar en público? Cuando en teatro la dicción, respiración, proyección, matices, etc. han sido tema de estudios y de técnicas diversas alrededor del globo.
En el campo de solución de problemas y toma de decisiones los actores son consientes del tiempo presente y de sus reacciones, el tiempo escénico es muy diferente al cotidiano, al ser observado y escudriñado por 100, 500 o mil personas. Hace que estés en alerta y en fracciones de segundos debes de reaccionar con un instinto cultivado y entrenado.
Que desde antes de pisar el escenario conozcas tus recursos y el trabajo en equipo se vuelve fundamental. Todos capitaneados por una presencia de liderazgo, que es el director de escena que juega el papel de un orquestador que guía hacia un fin común temperamentos y talentos individuales hasta formar una armonía en resultado.
Las herramientas teatrales, las dinámicas y prácticas tienen un propósito de exploración, expansión y formación humana, es claro que se han explotado para el fin concreto de la formación actoral, pero estas generan un desborde de mejorías en la extroversión, imaginería, comunicación y autorregulación emocional. Siendo esta es la razón del porque utilizamos estos recursos como apoyo en el rubro de la capacitación y con las cuales hemos generado resultados positivos en la retención y asimilación de conceptos empresariales.
Por desgracia se vincula al teatro solo con su dimensión de entretenimiento y en ocasiones se considera que este estilo podría desbocar en lo banal y superfluo, ¡tal vez muy entretenido! pero sin fondo, cosa que no pudiera ser más errada, si es cierto que la teatralidad gesta una dimensión de entretenimiento y la risa es un conductor que permite el acercamiento de temas difíciles en ningún momento descuidamos la preocupación de la aplicación temática, ni la vinculación con las experiencias individuales.
La capacitación basada en teatro va mucho más allá del socio drama y psicodrama, que meramente son solo una técnica en un océano de recursos, que al igual que el rol play se han sobreexplotado pero sin dar una base de expansión para el asistente.
Los resultados que ha tenido este modelo en Inglaterra, España y Argentina en el ámbito empresarial son excelentes y ahora en México el acercamiento y experiencia que hemos vivido en los pasados dos años, ha sido desde lo sorprendente hasta lo conmovedor y por supuesto condenadamente divertido.
Es un gusto para nosotros utilizar este vehículo electrónico para empezar a compartir desde la siguiente publicación de Mayo del 2010, algunas técnicas, reflexiones, temas, dinámicas y practicas sencillas que puedan realizar en su oficina o su casa y que con la base teatral se vinculen con el ámbito empresarial, esperamos que sean de utilidad para nuestros lectores. Nos escribimos en un mes.
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